Lunares

lunares

Tratamientos para eliminar lunares

Los lunares son lesiones de la piel que pueden aparecer en cualquier parte de la cara o del cuerpo. Suelen ser de color marrón, aunque algunas veces pueden ser más oscuros o del mismo color que la piel. Suelen tener forma redonda u ovalada con un borde liso. Pueden ser planos o elevados, lisos o ásperos, y también pueden contener pelos que salen de ellos.

Es posible que crezcan o que su aspecto cambie con el tiempo y lleguen a presentar síntomas tales como sangrado o prurito, aunque también pueden desaparecer espontáneamente. Siempre viene bien revisarlos cada cierto tiempo.

Si bien en la gran mayoría de los casos los lunares son inocuos, y básicamente son manchas oscuras que se encuentran en la piel, es importante que haya un diagnóstico acertado, ya que pueden ser semejantes a lesiones de otra naturaleza. Los lunares se presentan en un montón de variedades y formas diferentes. Y se pueden localizar en casi todas las partes del cuerpo.

Algunos lunares aparecen solos, mientras que otros se juntan y aparecen en grupos. En Top Clinic aplicamos diferentes tratamientos si deseas eliminar los lunares.

Llámanos y resolvemos todas tus dudas por teléfono.

La felicidad es bella

Queremos verte feliz, porque no hay nada más bello que la felicidad.

Déjanos tus datos y nos pondremos en contacto contigo lo antes posible para agendar una cita en una de nuestras clínicas:

Pide cita 

Tipos de lunares

El nombre médico de los lunares es nevus, palabra que viene del latín y significa “marca de nacimiento”. Un nevus es típicamente una mancha marrón sin mucho relieve. Sin embargo, puede presentarse con diferentes formas, tamaños y colores. Entre estos últimos, no es infrecuente observar que van del canela claro al negro, aunque también pueden tener tonos rosas o azules.

Puede suceder que se oscurezcan con los cambios hormonales del embarazo o de la adolescencia. También es posible encontrarlos en cualquier lugar, incluso bajo las uñas, entre los dedos o en el cuero cabelludo. Por su relieve, los hay planos o abultados, que sobresalen de la piel circundante.

Al tacto son lisos o ásperos, con aspecto de verrugas, y no es inusual que les crezca vello. Por su forma, lo más frecuente es que sean ovalados o redondeados, con bordes definidos o imprecisos.

En cuanto a su tamaño, la mayoría son de diámetro menor a 6 milímetros. La excepción son los nevus congénitos, que pueden extenderse en amplias zonas.

Lunares en la piel ¿por qué aparecen?

Los lunares, como se dijo al principio, son acumulaciones celulares que contienen un pigmento llamado melanina. Estas células reciben el nombre de melanocitos y se encuentran en la capa basal de la epidermis, por lo que son visibles a través de ella.

Las principales causas de la aparición de los lunares en la piel son:

  • Existe un componente genético evidente, ya que los hijos de padres con muchos lunares también los tendrán.
  • La interacción con factores ambientales es determinante, ya que aparecen con más frecuencia en las zonas expuestas a la radiación solar.
  • Por último, los cambios hormonales inciden en su aparición.

La mayoría de los nevus aparecen a edades tempranas de la vida, antes de los 30 años. A los que lo hacen después de los 40 años es necesario prestarles más atención, ya que podrían tener más probabilidades de convertirse en lesiones malignas.

Es importante destacar que no todas las marcas en la piel son lunares. Hay otros tipos de lesiones benignas entre las que figuran las efélides o pecas, las queratosis actínicas, los lentigos, los acrocordones y los puntos rubí o lunares rojos, compuestos por vasos sanguíneos dilatados.

¿Cómo se pueden eliminar los lunares?

El tratamiento para eliminar los lunares es necesario si hay probabilidad de malignidad o por razones estéticas. Las lesiones elevadas que se encuentran en los pliegues cutáneos, produciendo roces y molestias, también deben suprimirse. Las técnicas más frecuentes son las que se explican a continuación:

Escisión

La eliminación de los nevus se puede realizar con una biopsia sacabocados, que deja una cicatriz muy pequeña. Para los que son elevados, la escisión por afeitado también deja poca marca. La cirugía es apropiada cuando resulta necesario extirpar todo el lunar con los bordes completos para su evaluación histológica. En estos casos, se dan puntos de sutura.

Criocirugía

En esta técnica se utiliza un dispositivo llamado criosonda para aplicar gas argón o nitrógeno líquido en las lesiones. Las bajas temperaturas destruyen el tejido por congelación. El tratamiento dura unos segundos, es posible que se necesite más de una sesión y es apropiado para lesiones superficiales.

Láser

El láser de CO2 o ablativo es una tecnología que proporciona gran precisión. Es útil en muchos tipos de lesiones y genera una vaporización selectiva tanto en extensión como en profundidad que respeta el tejido sano circundante. El resultado es excelente, con muy poca o ninguna cicatriz.

¿Qué tipo de lunares son peligrosos?

La preocupación por el desarrollo de lesiones malignas cutáneas ha llevado a la comunidad médica a diseñar un concepto fácil de aprender. Es el ABCDE, que se explica a continuación.

  • Asimetría o crecimiento asimétrico.
  • Bordes o contornos irregulares.
  • Coloración asimétrica.
  • Diámetro que sobrepasa los 6 milímetros.
  • Elevación, lesiones que sobresalen.

Además, las lesiones que crezcan, sangren y produzcan picor o dolor también son sospechosas.

¿Vuelve a aparecer un lunar después de haber sido extirpado?

La eliminación completa del lunar generalmente evita su reaparición. En algunos casos es posible que reaparezcan los nevus, pero son una minoría.

Las lesiones de aparición reciente deben ser evaluadas por un dermatólogo. Eso es especialmente importante si se presentan en zonas expuestas al sol, después de los 40 años o si tienen características que podrían indicar malignidad.

Cuidados después de haber quitado un lunar

El periodo de recuperación puede variar, lo que dependerá del tamaño de la lesión tratada, su ubicación y la técnica seleccionada. Son importantes varios aspectos en el cuidado de estas heridas:

  • Uso diario de un vendaje limpio y seco.
  • Evitar exponer al agua durante los primeros días.
  • No eliminar las costras, si las hay.
  • Acudir al médico para que retire los puntos de sutura después de una semana.
  • Después de la recuperación, aplicar siempre protector solar en la zona.

Los lunares son lesiones comunes y frecuentes, pero en ciertos casos es necesario extirparlos. Los dermatólogos con más experiencia serán los profesionales indicados para evaluarlos y tratarlos.

Ir al contenido