Nariz
Tratamientos para la nariz
La nariz, aquella protagonista que genera tantos complejos a lo largo de nuestra vida. Existen muchos tipos: aguileña, respingona, griega, chata… Cada una con algo diferente.
Con el paso de los años, el miedo a pasar por quirófano ha ido poco a poco disminuyendo, llegando a aparecer hoy en día una técnica llamada “rinomodelación” con la cuál, conseguir la nariz deseada, ahora es posible y sin la necesidad de ningún bisturí.
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¿Qué puedo hacer si no me gusta mi nariz?
Los tratamientos de nariz son de los más habituales en las clínicas de estética. Son muchas las personas que no se sienten a gusto con su nariz y recurren a la rinoplastia. Es un rasgo físico que acompleja a un gran número de gente. Su posición, que ocupa el centro del rostro, y su prominencia la hacen muy visible y contribuyen a la armonía facial.
Es un rasgo que proporciona personalidad. Y tener una nariz que rompe esa armonía por ser grande, torcida o en forma de gancho, puede acarrear muchos complejos. Por ello, un gran número de pacientes recurre a la cirugía para modificar algún aspecto de su nariz. Es una solución segura para eliminar complejos y que una persona se sienta a gusto con su imagen.
Tipos de nariz
Cada nariz requiere una técnica concreta de rinoplastia. Es un tratamiento personalizado para el rostro de cada persona. El especialista estudia el caso y decide una técnica buscando el mayor grado de armonía de la estructura facial. Entre los tipos de nariz que habitualmente se someten a la rinoplastia, están:
- Nariz con protuberancias: sobresale cuando se mira de perfil y se observa una loma en el puente de la nariz. Suele denominarse joroba nasal. En ocasiones, puede darse por un traumatismo, pero también por la propia genética de la persona. La técnica que requiere este tipo de nariz pasa por eliminar la joroba reduciendo el cartílago nasal mediante intervención quirúrgica.
- Nariz torcida: la línea del eje facial que baja desde la ceja hasta la punta de la nariz está desviada. Es la nariz llamada laterorrinea. Los huesos del tabique nasal no están alineados en ángulo recto y la nariz se inclina a un lado. Esto puede darse por causa de un traumatismo (una caída, una lesión deportiva) que haya torcido el tabique. En este caso, la cirugía endereza los huesos nasales consiguiendo una armonía adecuada.
- Nariz muy puntiaguda o proyectada: a veces, si la punta de la nariz sobresale demasiado hace que se vea más grande. Para corregir una proyección nasal prolongada se puede elevar el puente de la nariz para igualar la punta. Otra técnica pasa por reducir la proyección de la punta.
- Nariz grande: sobresale mucho del rostro, quedando desproporcionada con respecto a este. La intervención quirúrgica trata de reducir su tamaño para crear la proporción adecuada en el conjunto del rostro.
Tratamientos estéticos para la nariz
En la actualidad, gracias a la innovación tecnológica médica, existen diversos tratamientos para modificar la nariz. Entre los más demandados, están:
- Rinoláser: se trata de una técnica no invasiva que corrige problemas estéticos de la punta nasal. Las modificaciones que pueden hacerse tienen que ver con el ángulo de la nariz, grosor, tamaño y proyección. La intervención requiere anestesia local y dura alrededor de una hora. El láser actúa sobre los cartílagos para que el especialista pueda recolocarlos o seccionarlos para modificar la punta.
- Rinomodelación: es un tratamiento de muy fácil aplicación que no requiere intervención en quirófano. Se realiza mediante una técnica no invasiva que utiliza relleno facial para conseguir un aspecto natural de la nariz. Normalmente, se usa para tratar irregularidades del caballete nasal, perfil o de la punta. Es una técnica efectiva para corregir irregularidades que no están muy acentuadas. La rinomodelación no permite modificar la base del hueso.
- Remodelado nasal sin cirugía: está recomendado para personas que buscan mejorar su estética nasal. Es habitual utilizarlo para alisar la piel de la nariz, corregir cicatrices o dar volumen a la punta de la nariz si es muy estrecha. El tratamiento se realiza mediante infiltraciones de relleno con agujas muy finas. Es una intervención ambulatoria y el paciente se reincorpora de inmediato a su rutina. Los resultados que se obtiene son muy naturales y visibles de inmediato.
- Rinoplastia: modifica la nariz mediante intervención quirúrgica por parte de cirujanos especialistas. Es un procedimiento quirúrgico que quita parte del hueso para disminuir su tamaño o modificar las desviaciones del tabique nasal. Este tratamiento modifica la forma y apariencia de la nariz. Se utiliza para mejorar la abertura de los orificios nasales, mejorar problemas de respiración y corregir defectos congénitos.
La rinoplastia puede hacerse mediante dos técnicas. La tecnología ultrasónica utiliza ondas sonoras para accionar herramientas que vibran y modifican hueso y cartílagos. Es una intervención menos agresiva que la tradicional. La técnica tradicional utiliza herramientas como martillo y cincel para modificar el hueso de la nariz.
Cuánto cuesta operarse la nariz
Remodelación de la nariz sin cirugía
En ocasiones, muchas personas no se operan la nariz por temor al quirófano. En los últimos años, la tecnología en estas intervenciones ha avanzado mucho y ya es posible corregir imperfecciones estéticas de la nariz sin necesidad de entrar al quirófano. Técnicas como las mencionadas con anterioridad (rinoláser, rinomodelación o remodelado nasal sin cirugía) no necesitan de ingreso hospitalario, ni de anestesia general. Se realizan con cirugía mínimamente invasiva y a las pocas horas se puede hacer vida normal.
Este ha sido un breve recorrido por las distintas técnicas de remodelación de nariz. Una solución para corregir la nariz y eliminar los complejos que mucha gente tiene debido a su tamaño, grosor o perfil. Con algunos de estos tratamientos ya no es necesaria la intervención quirúrgica y tienen un postoperatorio muy sencillo y rápido.