La hiperhidrosis o la excesiva sudoración no siempre están relacionadas con el ejercicio físico o el calor, esta puede causar molestias a la hora de trabajar, o para disfrutar de actividades recreativas llegando a disminuir la calidad de vida de quien la sufre.

¿Qué es la hiperhidrosis?

La hiperhidrosis es una sudoración excesiva en diferentes áreas del cuerpo, aumentando la secreción de las glándulas sudoríparas.

El aumento de estas secreciones puede deberse a la hiperactividad en las glándulas, ya sea cambios hormonales, por situaciones que nos provoquen estrés, tensión emocional o por algún tipo de fármaco que estemos tomando en ese momento.

Esta afección suele darse con mayor frecuencia en las manos, pies, axilas o cuero cabelludo.

¿Qué tipos de hiperhidrosis hay?

Podemos encontrar dos tipos de hiperhidrosis.

  • Hiperhidrosis primaria: en este caso la sudoración se presenta en cualquier momento y sin una causa evidente, en la mayoría de los casos donde se presenta esta hiperhidrosis es en palmas de manos y pies.
  • Hiperhidrosis secundaria: este tipo suele tener una causa subyacente como  puede deberse a trastornos hormonales, trastornos tiroideos, tumor o diabetes, en este caso, la sudoración aparece por todo el cuerpo. 

Tratamientos para la hiperhidrosis.

El tratamiento de esta afección puede empezar tratando la causa subyacente que lo provoca, si esta causa no se encuentra o simplemente es una hiperhidrosis primaria y no tiene, se trata la excesiva producción de sudor. Podemos encontrar múltiples tratamientos, por si el tratamiento principal que se le plantea al paciente no funcional poder tener más alternativas. Aunque veamos que esta excesiva sudoración se reduzca y mejore, puede volver a aparecer.

Podemos distinguir varios tipos de tratamientos para la hiperhidrosis.

Remedios naturales

En algunos casos la sudoración la podemos controlar de manera casera y sin tener que tomar medicación o pasar por una cirugía, alguno de los remedios caseros que pueden funcionar son:

  • Usar antitranspirante: pueden bloquear de manera temporal los poros haciendo que tu sudoración se controle y haya menos cantidad, debes usarlo antes de ir a dormir y después de levantarte.
  • Zapatos y calcetines de materiales naturales: los zapatos hechos de materiales naturales ya sea el cuero o cualquier otro tipo de material, hacen que nuestros pies suden menos, también los calcetines con control de humedad ayudan a reducir la sudoración del pie.
  • Mantener las manos y los pies secos: debes cambiarte de calcetines al menos dos o tres veces al día sobre todo después de hacer deporte y mantener los pies secos al igual que las manos.

Medicamentos para hiperhidrosis

Los medicamentos para tratar la hiperhidrosis son los siguientes (siempre bajo la supervisión de un médico especializado): 

  • Antitranspirantes de venta con receta médica: Puede que tu médico te recete antitranspirante a base de cloruro de aluminio, ya que tiene una gran eficacia demostrada a la hora de taponar las glándulas ecrinas. Lo debes aplicar antes de ir a la cama y dejarlo secar, por la mañana, debes enjuagarlo con abundante agua, es muy importante que no tenga contacto con los ojos. Empezarás a notar los resultados cuando pasen varios días, una vez esto suceda, puedes reducir la frecuencia de una o dos veces por semana para mantener los efectos conseguidos. Uno de los efectos secundarios de este producto es que irrita tanto los ojos como la piel, por ello debes hablar con tu médico especialista para que te explique cómo reducir estos efectos secundarios.
  • Toallitas o cremas de venta con receta médica: este tipo de cremas contienen glicopirrolato, un fármaco que ayuda a controlar la sudoración, estas cremas ayudan sobretodo, a la hiperhidrosis producida en la cara y cabeza, en cambio las toallitas que también están impregnadas en glicopirrolato, ayudan a la sudoración excesiva en manos, pies y axilas. Los efectos secundarios que nos pueden producir las cremas y toallitas son una leve irritación en la piel y sequedad en la boca.
  • Medicamentos para bloquear los nervios: algunas pastillas pueden llegar a bloquear los nervios que se encargan de producir esa sudoración, esto no es  eficaz en todos los pacientes. Los posibles efectos secundarios son piel seca, sequedad en la boca, visión borrosa y problemas en la vejiga.
  • Inyecciones de toxina botulínica: este tratamiento bloquea los nervios que activan las glándulas sudorípara, aunque a la mayoría de los pacientes este procedimiento les resulta muy poco doloroso, tu médico especialista puede aplicar en la zona anestesia local para adormecer la zona donde vamos a inyectar la toxina botulínica. Para tener los resultados deseados vamos a tener que pinchar en la zona en varias ocasiones para bloquear todos los nervios, y para que este resultado perdure en el tiempo va haber que repetir este procedimiento aproximadamente cada 6 meses.

Cirugías para hiperhidrosis

Una vez hemos probado todos los tratamientos y no hemos obtenido resultados deseados podemos proceder a hacer un intervención quirúrgica como las siguientes:

  • Iontoforesis: con este tratamiento vamos a remojar las manos o pies, dependiendo de qué zona del cuerpo tengamos nuestra hiperhidrosis, dentro del cubo de agua donde tenemos estas zonas del cuerpo, vamos a tener también un aparato que desprende una corriente eléctrica bloqueando así los nervios que provocan la sudoración. Para que el tratamiento funcione debes remojar las manos de 30 a 40 minutos. Para conseguir los resultados deseados debes repetir este tratamiento de 2 a 3 veces por semana hasta que los síntomas mejoren, después puedes disminuirlo a una vez por semana o una vez por mes para mantener los resultados.
  • Tratamiento con microondas: para poder realizar este tratamiento necesitamos un dispositivo portátil que emite unas microondas para destruir las glándulas sudoríparas, este tratamiento debe realizarse en dos sesiones cada una con tres meses de diferencia, la duración de este tratamiento es de aproximadamente 30 minutos. Algunos de los efectos secundarios que podemos notar son un cambio en la sensación de la piel y un poco de molestia. 
  • Extracción de glándulas sudoríparas: si el problema de tu hiperhidrosis se centra exclusivamente en las axilas tu médico te puede sugerir una extracción de las glándulas sudoríparas de la zona. Esto se puede hacer a través de un raspado, una succión o una mezcla de ambas. 
  • Simpatectomia (cirugía de los nervios): en esta intervención el cirujano extirpa una pequeña parte de los nervios de la columna vertebral, que controla la sudoración de las manos, puede aparecer la sudoración compensatoria, es un posible efecto secundario, que conlleva a la sudoración en otras zonas del cuerpo. Esta cirugía no suele realizarse cuando es una sudoración excesiva de casos aislados del cuello o cabeza. como esta cirugía conlleva efectos secundarios y complicaciones, ya que estamos extirpando nervios, solo se contempla en personas que anteriormente hayan probado más tratamientos, pero, no hayan obtenido resultado.

Si necesitas más información antes de llevar a cabo tu tratamiento para hiperhidrosis, puedes contactarnos y preguntarnos cualquier duda o acudir a cualquiera de nuestras clínicas y solicitar tu primera consulta gratis.

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