La depilación láser es un gran método para eliminar el vello de forma permanente, siendo necesarias varias sesiones de depilación para conseguir el efecto deseado.
Cabe destacar que el procedimiento de depilación láser no es extremadamente doloroso. Sin embargo, puede generar sensaciones molestas por su repetición y en función de la sensibilidad y predisposición de la persona. Hoy en día los resultados son excepcionales y el procedimiento cada vez más sutil y llevadero.
A día de hoy son muchas las personas que utilizan este tratamiento para deshacerse de todos esos vellos de la zona corporal que les causan molestias o simplemente no resultan atractivos.
¿Cuánto tiempo dura el tratamiento de depilación láser?
La duración de cada sesión de depilación láser y el número de sesiones, depende de la anatomía del paciente, es decir está relacionado con la extensión de la zona a tratar. Hay que tener en cuenta que es un proceso a largo plazo, ya que se debe atrofiar sesión a sesión el folículo piloso del vello. Cabe destacar que los resultados serán visibles desde la primera sesión.
Por lo tanto, la duración del tratamiento de depilación dependerá de diferentes factores como el tipo de piel, el tipo de vello, la zona a tratar y antecedentes médicos u hormonales.
El intervalo de tiempo entre cada sesión varía según cada paciente ya que dependerá también del método de depilación previo que utilizamos; por ejemplo: un método de arranque como la cera altera los ciclos de crecimiento del vello. Por lo tanto, de forma general la duración de un tratamiento de depilación láser, varía entre 8 a 12 meses, salvo casos específicos.
En cuanto al intervalo que debe transcurrir entre sesión y sesión de depilación, los datos resultan diferentes entre hombres y mujeres y entre depilación facial y corporal:
En el caso de las mujeres: La depilación facial comienza realizándose con sesiones cada cinco semanas y más adelante suelen espaciarse en torno a las seis semanas.
Para la depilación corporal las sesiones se llevan a cabo cada ocho o 10 semanas.
En el caso de los hombres: La depilación facial comienza realizándose con sesiones cada dos semanas, en cambio en la fase final del tratamiento se prolongan más allá de las cuatro semanas.
Para la depilación corporal lo más normal es que se vuelva a citar al paciente en un período que fluctúa entre los dos y los cuatro meses, dependerá, entre otras cosas, de la zona tratada y la cantidad de vello que se quiera eliminar.
¿Puede volver a crecer el pelo?
El principal objetivo de la depilación láser permanente es eliminar el vello no deseado de nuestro cuerpo, ya sea facial o corporal como, por ejemplo: eliminar el vello de las piernas completas.
La energía que contiene el haz de luz del láser es captada por la melanina del vello y se convierte en calor, quemando la matriz haciendo que no vuelva salir.
En aquellas zonas donde se aplica el tratamiento. El vello dejará de crecer. Por lo tanto, podemos afirmar que es un tratamiento definitivo.
Hay situaciones en las que al empezar el tratamiento se puede notar la aparición de un nuevo vello corporal sobre la zona depilada, esto se debe a que en alguna sesión anterior, este vello aún no estaba en su etapa de crecimiento, por lo que su folículo aún no ha sido destruido.
Cuando la piel es más oscura empleamos la depilación láser de Diodo ya que absorbe la luz de menor manera para no afectar a la piel, eso sí, es menos efectiva para vellos medianos y finos. Se aplica fundamentalmente sobre vellos gruesos u oscuros, especialmente si tienen gran profundidad, ya que el láser penetra más en la piel.
¿Quién no puede realizar el tratamiento de la depilación láser?
Si bien la depilación láser es efectiva para eliminar el vello no deseado de cualquier zona corporal, hay casos en los que no es recomendado hacer uso de este tratamiento, como puede ser la pigmentación del vello. Ciertos medicamentos que deben ser informados al especialista, enfermedades o infecciones en la piel, o estados determinados en los que se encuentre nuestro cuerpo.
- La depilación láser sobre vello rubio, pelirrojo o canoso
La depilación láser depende en gran medida del nivel de melanina de nuestros folículos pilosos. Cuanto más oscuro y fuerte sea el vello mejor captará el láser.
En este sentido, el hecho de que nuestro vello sea rubio, canoso o pelirrojo, dificultará al láser la tarea de detectar el folículo, por lo que no podemos asegurar al 100% la efectividad del tratamiento.
- Medicamentos fotosensibles
Cuando se toman medicamentos fotosensibles no es recomendable iniciar un tratamiento de depilación láser. Estos medicamentos pueden hacer que la piel reaccione de forma negativa al ser expuestos a ciertos tipos de luz.
- Enfermedades cutáneas
El tratamiento de depilación láser puede ser compatible con enfermedades cutáneas como la dermatitis o la psoriasis, pero hay que tener precaución dependiendo del grado en el que se encuentren los síntomas el día de la sesión.
- Durante el embarazo
Son varias las razones por las que no se recomienda realizar este tratamiento durante el periodo de embarazo. En primer lugar está relacionado con el mayor número de progesterona que presenta nuestro cuerpo durante este período, siendo mayor al habitual.
La progesterona provoca que nuestro vello crezca de forma más lenta e irregular durante este periodo.
Por otra parte, podemos nombrar también el aumento de estrógenos durante el embarazo. Estos causan que nuestra piel se encuentre más sensible y pueda provocar molestias en el proceso de depilación láser.
Si necesitas más información antes de llevar a cabo tu tratamiento de depilación láser, puedes preguntarnos cualquier duda o acudir a cualquiera de nuestras clínicas y solicitar tu primera consulta gratis.